
¿Qué es procrastinar? Procrastinar es dejar para otro momento esa acción que sabes que es tan importante, pero que ahora mismo no quieres hacer.
Sabrás si eres un procratinador si eres de los que lo deja todo para el último momento.
Lo curiosos es que para no sentirte tan mal, te pones a hacer cualquier otra cosa con menos transcendencia.
No te agobies, le pasa a todo el mundo, lo hemos hecho desde pequeños ¿Quien no se ha puesto a ordenar el escritorio por no ponerse a estudiar?
Lo importante es que adquieras consciencia de que estas actividades que postergamos en realidad son una pesada losa que no te dejan disfrutar más tarde de tu tiempo de ocio.

¿Quieres ser una Madre o Padre Involucrado?
Únete a nuestra Tribu y descubre cómo empezar a pasar tiempo de calidad con tu familia.
En este post no solo vas a descurbrir como dejar de procrastinar. Además te vas a convertir en una persona más productiva y que disfruta de un mayor tiempo de ocio y de calidad.
Aunque antes, queremos que te quede claro el concepto. Veamos lo que dice Wikipedia acerca del significado de procrastinar
La procrastinación, postergación o posposición es la acción o hábito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables.
Una imagen vale más que mil palabras. Aquí te dejamos un vídeo para que no te queden dudas del significado de procrastinar, como ya habrás deducido postegar es un sinónimo de procrastinar.
¿Cómo parar de procrastinar?
En este post vamos a empezar por la solución. Si eres un procrastinador, como yo, y lo dejas a mitad, quiero que al menos te lleves la solución a tus problemas. Aunque dejes el resto para mañana. (Es broma)
¿Qué te parecería si te dijera que con este post vas a descubrir cómo evitar procrastinar, de una vez por todas, jugando más?
Sí, como lo oyes, cuanto mejor sea tu tiempo de ocio, más sencillo te va a resultar parar de procrastinar.
Puedes dejar de procrastinar hoy mismo aplicando 3 sencillas herramientas extraidas del libro, Hazlo ahora, de Neil Fiore.
Herramienta 1: Divide tus proyectos en pequeñas tareas
En la mayoría de las ocasiones postergamos porque nos da pánico enfrentarnos a un proyecto dadas sus dimensiones.
Solo pensar en todo lo que tendremos que hacer, las dificultades que tendremos que afrontar y los problemas que quizá no sepamos resolver, hace que nos bloqueemos. A la mayoría de gente nos pasa, imaginamos el duro trabajo, nos entran sudores fríos y nunca encontramos el mejor momento de empezar.
¿Sabes como se empieza a recorrer el camino? por el primer paso o como dice el Mago More, "Un elefante se come a bocados pequeños"
Un elefante se come a bocados pequeños. Mago More
Así que vamos a diseccionar a nuestro elefante, ese gran proyecto que te atormenta, en pequeños bocados que te sean fáciles de digerir.
Visualiza cual es el resultado que esperas obtener y los pasos que tienes que dar para llegar a él. Estas serán las pequeñas etapas que vas a tener que dar hasta llegar a tu meta. Estos pasos tienen que ser acciones lo más sencillas posible y que no te ocupen más de 30 minutos.
Redáctalas de la siguiente forma:
Verbo de acción + cantidad + fecha de finalización
Piensa en las siguientes tareas:
- Entregarle a mi jefe el resumen de cifras anuales
- Recopilar 10 datos anuales para antes del lunes a las 12h
¿Notas que la segúnda frase parece más asumible y te incita más a la acción?
Pues este es uno de los mayores beneficios de esta técnica, te va a parecer que la tarea es tan diminuta que vas a perder el miedo a hacerla. Otro beneficio es que ya no vas a tener que reservar horas y horas ininterrumpidas a tu proyecto, cualquier media hora que tengas libre va a ser una oportunidad para avanzar el él.
Paso 1: Divide tus proyectos en tareas de no más de 30 minutos.
Herramienta 2: Elimina la preocupación de tu vida
Otra de las razones de postergar, es nuestro miedo al fracaso o a no ser lo suficientemente buenos.
Pensamos que cada cosa que hacemos demuestra nuestra valía. Así que, estamos examinándonos continuamente.
Nuestra mente viaja libremente a un futuro incierto, en el que no nos vemos capaces de realizar esta tarea y las consecuencias que esto puede tener. Ante este futuro catastrofista nuestra nos sentimos agobiados y terminamos bloqueándonos.
Esta sensación se incrementa cuando no tenemos o nos pensamos que no disponemos de las habilidades suficiente.
La pescadilla que se muerde la cola. No se hacer algo, me agobio, lo postergo y por tanto no desarrollo la habilidad necesaria para superar los obstáculos..
Piensa en todos los retos que has superado en tu vida. Todos los exámenes a los que te has enfrentado y en los que has salido airoso. Tal vez, algunos te costaron más que otros pero con la dedicación oportuna los has podido aprobar seguro.
Puede que este pensamiento positivo no sea suficiente para ti. Vayamos al caso contrario.
Piensa en lo peor que te puede pasar si haces mal tu tarea. ¿Tal vez te lleves una bronca del jefe? ¿Puedes vivir con ello? ¿Se va a acabar el mundo?
Aquí te tengo que decir que como todos, he tenido jefes. La verdad es que aunque hiciera mal algo, nunca me llevé una bronca. Esto es debido a que la mayoría entienden que la dedicación está por encima de los resultados y que los errores son parte del aprendizaje.
Imagina que lo haces tan rematadamente mal que te despiden. ¿No serías capaz de encontrar otro trabajo?
Aún así, piénsalo detenidamente: ¿Qué probabilidades hay de que te despidan por hacer mal una tarea?
Ahora piensa, ¿Qué probabilidades hay de que te despidan por no hacer una tarea? Seguramente muchas más.
Paso 2: Cuando sientas preocupación por el resultado. Piensa, ¿Qué es lo peor que me podría pasar si lo hago mal?
Herramienta 3: Puesta en marcha persistente
Interioriza el hábito de empezar cosas. Lo más importante es romper la inercia que nos impide ponernos en movimiento.
Piensa cuando se estropea un coche y hay que empujarlo. Al principio hay que hacer mucha fuerza pero una vez que se empieza a mover ya todo va sobre ruedas, nunca mejor dicho.
Lo mismo ocurre con tu fuerza de voluntad. Es muy difícil levantarse del sofá pero una vez que lo haces el siguiente paso es mucho más sencillo.
Ahora tienes tareas de 30 minutos, así que te va a resultar más fácil que nunca romper la pereza inicial. Proponte hacer la primera, no pongas excusas, simplemente hazlas y una vez que empieces veras como la siguiente te cuesta menos trabajo hacerla.
Voy a compartir contigo el consejo que me dio mi entrenador en el gimnasio cuando le propuse ir 3 veces a la semana.
Me dijo: "Óscar si de verdad quieres venir 3 veces, simplemente hazlo. Aunque no te apetezca hacer ejercicio, ven aunque sea a ducharte." La verdad que una vez que estabas en el gimnasio, me resultaba muy complicado irme a la ducha sin ni siquiera hacer algo de cinta.
Otro de los truquillos que utilizo son los 10 minutos del héroe.
Cada día se un héroe durante 10 minutos. Llenaté de valor y haz eso que tanto miedo te da.
Hay muchas tareas que aunque sean sencillas para el resto de la humanidad, a mí me superan. Por tanto, todos los días juego a ser héroe durante 10 minutos. En ese periodo hago todo lo que no me atrevo a hacer. Lo que descubro es que la mayoría de mis miedos son infundado y me cuesta hacer las cosas menos de lo que pensaba. Esto me da un subidón de adrenalina que suelo aprovechar para el resto del día.
Paso 3: Proponte empezar, aunque sea solo dar el primer paso, así habrás vencido la resistencia inicial.
La no Agenda o como parar de procrastinar jugando más.
En realidad posponer las cosas para más adelante no es tu verdadero problema, casi siempre hay un deadline donde te pones las pilas y lo acabas terminando.
Lo peor es esta sensación de agobio que da tener una montaña de cosas inacabadas. Estas tareas, aunque creas que no, te restan energía y hacen que no puedas disfrutar de tu tiempo de ocio.
Por tanto, vamos a darle la vuelta. Vamos a poner por delante, lo importante, que puedas disfrutar de la vida y por tanto de tu ocio sin culpabilizarte por ello.
Te he prometido antes que te ibas a divertir más. Estate atento porque ahora viene lo bueno.
Voy a pedirte una cosa. Compromémete a hacer aquellas cosas que te gustan. Por si no lo sabes, si estás esperando a disfrutar de la vida cuando termines todos tus proyectos, ese día no va a allegar nunca.
Quiero que empieces a vivir de verdad tu vida desde ya. Así que vas a aprender a utilizar la No Agenda.
Primer paso:
Piensa en todo eso que te gusta hacer.
¿Lo tienes? Ahora anótalo en tu agenda. Es inamovible, no es negociable y te tienes que proponer disfrutarlo de verdad, sin preocuparte de todo lo que te has dejado por hacer.
Resáltalo en rojo para que destaque más y no se te pueda escapar.
Segundo paso:
Ahora anota todas esas cosas que tienes que hacer sí o sí y que no forman parte de tu trabajo. Dormir, comer, desplazamientos, recoger a los niños, son algunos de los ejemplos.
Agenda también todas esas tareas que forman parte de tu trabajo y que tienes que hacer pero que no te van a llevar al éxito. Leer el correo, asistir a reuniones, etc.
Si te ha sorprendido que te diga que leer el correo no te va a hacer triunfar no dejes de leer este post. En él descubrirás que leer el email, aunque forma parte de tu trabajo, no es sinónimo de productividad.
>> Errores que cometemos cuando gestionamos nuestro email<<
Ya tienes una visión más realista de cómo va a ser tu semana. Date cuenta que en realidad no quedan muchos huecos para que puedas realizar un trabajo de calidad. Esto por lo menos te va a hacer pensar que no tienes todo el día para andar postergando.
Tercer paso:
Ha llegado el momento de colocar aquellas acciones que te van a llevar al éxito. Recuerda que su duración no puede ser superior a 30 minutos. Cualquier hueco que tengas, ahora es una gran momento para trabajar en tu proyecto estrella.
Voy a pedirte un último esfuerzo, no trabajes en tus proyectos ganadores más de 20 horas a la semana ni más de 5 horas al día.
¿Cómo, que trabaje menos?
Efectivamente, tu reto para dejar de procrastinar es trabajar en tus proyectos menos y ser implacable con tu ocio.
Eso sí. Tu trabajo ha de ser de calidad. Esos 30 minutos de cada tarea, han de ser 30 minutos reales. Libres de llamadas, correos, distracciones e interrupcions.
¿Sabes lo que va a ocurrir a partir de ahora?
Primero, como eres consciente de que tu agenda tiene muy pocos huecos, cuando lleguen estos no lo dudaras y te dedicarás en cuerpo y alma a lo que tienes programado.
Segundo, como ahora te está esperando tu tiempo de ocio después de un buen trabajo, te sentirarás más comprometido con tus acciones.
Tercero, como solo puedes trabajar 20 horas semanales, elegirás mejor a que dedicas tu tiempo y por tanto vas a ser más eficaz.
Pasadas un par de semanas, evalúa tus resultados y tus estados de ánimo. Tal vez quieras trabajar un poco más de 20 horas. Hazlo porque te apetece, porque ahora decides hacerlo pero no se lo quites a tu tiempo de ocio de calidad ni a tu sueño. Quitaselo por ejemplo a los café, a la televisión. etc.
No Agenda:
- Reserva tu tiempo de ocio
- Anota el tiempo destinado para dormir, trayectos, etc
- Anota todas aquellas citas de la semana
Los huecos que quedan son los que podrás destinar a tu trabajo de calidad.
Causas de la procrastinación
Si has llegado hasta aquí. Ya tienes algunas herramientas para dejar de procrastinar. Pero no te conformes con esto.
Esto que te he dado es solo la medicina, sin embargo tenemos que atacar las causas para eliminar completamente la procrastinación de tu vida.
Procrastinamos cuando sentimos que nuestra valía se siente amenazada.
Tenemos programado en nuestra mente que valemos lo que valen nuestros resultados y por tanto cada vez que hacemos algo lo que estamos poniendo a examen en nuestra "valía como persona". Es normal sentirse abrumado ante tanta exigencia. Así, si dejando temporalmente la tarea por realizar, aliviamos instantáneamente esta sensación de ponernos a prueba.
Aunque, piénsalo. Esa tarea sigue ahí esperándote y dejarla para el último momento no va a generarte nada más que estrés y un trabajo no tan bueno como el que eres capaz de realizar.
Se pueden resumir en 3 motivos para postergar:
- 1El miedo al fracaso, a no ser lo suficientemente buenos de cara a lo demás.
- 2Miedo a expectativas imposibles. Nos sentimos abrumados ante una tarea que sentimos que nos supera
- 3Miedo a ser imperfectos. A todo el mundo nos gusta hacer las cosas impecables, sin fallos,pero en muchas ocasiones esto hacer que nos paralicemos y nunca nos sintamos preparados.
Cuando asumes que tu no eres tus resultados, te permites tener fallos y te valoras como persona es cuando empiezas a superar el hábito de procrastinar.
¿Por qué procrastinamos?
La procrastinación es gratificante. Hace que nos liberemos temporalmente del estrés.
Evita que nos tengamos que enfrentar a nosotros mismos y a nuestros miedos. Así que buscamos acciones que nos aportan una recompensa más instantánea, aunque este premio sea mucho peor que el gran regalo final del trabajo bien hecho.
Una de las cualidades que define al procrastinados es que suele pasar su tiempo en tareas que no le motivan realmente. No realizar las acciones que le llevan al éxito pero tampoco se puede recompensar con grandes lujos.
En el mejor de los casos, se dedicará a responder correos electrónicos, a ordenar archivadores o a hacer llamadas telefónicas intrascendentes para sentirse productivo. en el peor de los casos, lo suistituirá por café, ver la televisión o navegar en las redes sociales. Procrastinar y las redes sociales suelen estar íntimamente ligados. Todo vale para distraer a nuestro pequeño monstruito.
Mentalízate. Aquello que no estás haciendo es que que más tienes que hacer. Y lo sabes.
Lo que estás postergando es aquello que más necesitas hacer para crecer.
Otro de los motivos, es nuestra rebeldía ante la perspectiva de nuestra vida.
Sentimos que tenemos una vida llena de "deberías" y nos da la sensación que nos pasamos la vida haciendo cosas que no nos gustan en lugar de disfrutar. Lo hemos interiorizado tanto que nuestro lenguaje interior nos lo dice continuamente, incluso en aquellas acciones que se supone que tiene que ser de ocio y llevarnos al disfrute.
"tengo que comprar las entradas para el cine"
"debería prepararme la maleta"
Así, llegamos a pensar que continuamente estamos haciendo cosas impuestas desde fuera en lugar de hacer las cosas que nos apetece hacer.
Para modificar esta sensación, tienes que cambiar primero la forma en que te expresas.
Prueba a cambiar en tu vocabulario "debería o tengo que..." por "Yo elijo" o "Yo decido"
Notas como te cambia nuevamente la corporalidad.
Incluso en aquellas cosas que menos te apetece realizar, puedes apreciar el cambio:
- Debería hacer el informe mensual
- Elijo hacer el informe mensual para ser un buen profesional
5 afirmaciones que realizan las personas productivas
- 1Cambia el "tengo que" por "yo elijo hacerlo"
- 2Sustituye "tengo que acabar..." por "¿Cuándo puedo empezar?"
- 3Olvídate de la frase "tengo que ser perfecto", ahora dí: "Soy imperfecto pero doy la mejor versión de mi mismo"
- 4Nunca digas: "Este proyecto es muy grande e importante", y sí "puedo dar al manos el primer paso"
- 5Recuerda eliminar de tus pensamientos: "No tengo tiempo para mi ocio", piensa: "debo tomarme mi tiempo de ocio"
¿Cómo procrastinar productivamente?
Ya te hemos dado anteriormente las herramientas para dejar de procrastinar. Aunque vamos a ser sinceros, con ellas no vas a dejar de procrastinar.
Siento decepcionarte.
Siempre estarás moviendo tareas en tu agenda. Lo que ocurre es que ahora tus proyectos se han convertido en una lista de acciones más pequeñitas, fáciles de hacer y con un tiempo determinado.
Esas tareas tendrás que agendarlas. Por supuesto, estarás postergandolas, pero ahora para colocarlas en un momento determinado donde sí o sí vas a realizarlas. Ahora tienes asegurado tu tiempo de ocio, sabes que no te va a llevar más de 30 minutos, por tanto no vas a tener excusa para no ponerte a trabajar en ella.
Además si has terminado de leer este post ya sabes qué es procrastinarar pero ahora tienes el coraje suficiente para enfrentarte a cualquier cosa. Así que cuando llegue el momento no te temblará el pulso a la hora de afrontar cualquier reto que se te ponga por delante.
Ánimo!!!
Pues ahí que seras responsables ponernosas al corriente a nuestras cosas de la casa de la escuela y de los trabajos terminar todos para no andar a prisas para entregar
Me parecio unaa muy buen resumen la vvd fue muy bueno, aprendi.muchas cosas etc
Me interesa mucho el tema, soy de ese tipo de personas y quiero eliminar definitivamente ese mal.